Un cierre acorde

Llegó la última fecha. Esa que no lo encontraba al tricolor luchando por el campeonato o cuanto menos por un ascenso como hubiera deseado. La que igualmente había que afrontar con el mayor de los compromisos, para que Melmac pudiese terminar en el cuarto puesto, lo más arriba posible. El rival de turno era Mc Pantuflas, otro que a lo largo del año estuvo expectante a los puestos de ascenso, pero que perdió puntos en el camino y no podría lograr su objetivo. Dos realidades similares brindaron un partido con poco brillo, donde ninguno supo imponerse y el 0 a 0 final fue un justo resultado.

En la primera parte los amigos de Alf fueron un poco más que MCP. Era, de los dos, el que más intentaba poner la pelota al suelo y desbordar para terminar los ataques por el centro del área. Tuvo un par de buenas combinaciones por ambas bandas entre volantes y laterales. También algunos intentos desde media distancia que intentaron llevar peligro al 1 rival. Así y todo las chances fueron pocas, y para colmo los delanteros no estaban del todo finos. Un calor agobiante y una cancha pesada complementaban un partido lento, con poco vuelo. El rival era cuidadoso cuando tenía la pelota, dándole buen trato e intentando elaborar mediante pequeñas sociedades que nacían desde pases cortos. Igualmente no consiguió lastimar en esos primeros 40, la defensa melmaciana siempre se mostró firme.

Para la segunda mitad la cosa se emparejo para abajo. MFC bajó un poco su nivel y Pantuflas por su parte lo levantó, pero no mucho. Quedaron más emparejados. Las más claras las tuvo el elenco naranja haciendo revolcar a Nacho en 2 oportunidades. Una fue un remate desde afuera del área que el 1 tapó a mano cambiada. La otra un punta que entró mano a mano desde la derecha y que el menor de los De Angelis desactivó bien achicando y tapando abajo. Los tricolores tuvieron las suyas y seguían teniendo más la pelota. Pero el gol parecía negarse en el mediodía de Ciudad Universitaria. A medida que corría el reloj el 0 en los dos arcos era cada vez más infranqueable. Ni los cambios le dieron frescura al partido. 

Melmac cerró un año jugando un partido discreto. Es cierto que en el global mereció un poco más, pero no por mucho. Se fue también, con este resultado, la posibilidad de alcanzar la cuarta colocación, esa que hubiese dejado la esperanza de ascender si se abriese un cupo en la DH. Sin dudas, este no fue el año tricolor. Luego de tres años de éxitos consecutivos, los oriundos del norte del Gran Buenos Aires pagaron muy caro sus errores. Lo que más hace morder la bronca al plantel es que esas falencias, esos resultados que se escaparon, fueron ante los rivales más débiles del certamen. Hay que barajar y dar de nuevo. Se analizará lo bueno, lo malo y se llegará a un balance. Siempre mirando hacia adelante. Para que lo que esté por venir sea mejor que lo que se fue. El futuro, llegó hace rato, parafraseó una vez alguien. De eso se trata un poco la historia. Que el éxito vuelva a rodar por el verde césped que pisa este plantel.

Y como son todos una manga de amargos, cagones y pecho frío, no vamos a hacer uno x uno del último partido para no hacerlos pasar vergüenza. Hasta el año próximo!