A pesar de todo

No siempre el fútbol premia al que más arriesga ni al que mejor hace las cosas. Es que en el fútbol la justicia está lejos de existir. Por eso este sábado Melmac FC hizo hasta lo imposible para llevarse los tres puntos frente a "Y también Morcilla" pero terminó con las manos vacías ya que en un descuido se le escapó el partido. Un empate heroico y luego una derrota inesperada y dolorosa.

El choque de por sí era duro, y en la primera parte esto iba a quedar evidenciado. Los tricolores no eran mucho más que su rival y para colmo pagarían demasiado caro un par de errores cometidos. Sí, porque Morcilla tuvo solo dos chances y las mandó a guardar. El primero tras una salida en falso desde el fondo entre el arquero y Giovagnoli, que López nunca llegó a poder corregir del todo, permitiéndole a uno de los volantes de verde clavar un zapatazo de 30 metros que se metió junto al palo. Y tras una pelota que se perdió ingenuamente en la mitad de la cancha, los amigos del asado se encontraban con algo totalmente inesperado: mano a mano y el 2 por 0. Era demasiado premio para un equipo que hacía poco. Pero también hay que marcar que a los capitaneados por De Angelis no generaban demasiado y cuando lo hacían la bocha no entraba.

Los cambios para la segunda mitad iban a ser claves. Es que desde el vértigo y la eficacia del cabezón Dotta y el amor propio y el fútbol del menor de los Cicciaro (ambos recién ingresados) Melmac FC consiguió llegar al empate antes de los quince minutos. Es más, a esa altura ya merecía estar ganando el partido, porque antes de conseguir el empate MFC tuvo varias jugadas claras. Luego del segundo tanto, el aluvión de fútbol bajó en intensidad pero no por eso desapareció el protagonismo de los amigos de Alf, que seguían haciendo todo para estar arriba en el marcador. Morcilla solo se dedicaba a defender y no tenía ninguna idea clara salvo esperar algún error de su rival. Dicho error iba a aparecer faltando cerca de diez minutos para el cierre: una desatención tripartita entre Giménez, López y el portero melmaciano, que un delantero rival apenas llegó a tocar, pero con tanta fortuna que puso la bocha contra un palo.

Melmac FC siguió yendo, arriesgando y siendo ese equipazo de mitad de cancha hacia adelante, pero el empate no iba a aparecer. En este torneo los de Vicente López han perdido de manera injusta algunos puntos. Y la del sábado fue la mayor muestra de esto. Cierto es también marcar que todos los goles del rival llegan tras algún error. Pero cuesta desprenderse de la idea de que MFC paga caro todos los errores asi sean uno o tres (por ejemplo cada remate de media distancia termina siendo inatajable y colándose en los ángulos) mientras que a los réditos por proponer todo el tiempo y generar situaciones claras no son los esperados (al menos no siempre).

El torneo sigue abierto porque cada día hay más resultados sorpresivos aunque Melmac FC haya perdido una gran oportunidad para quedar entre los puestos de ascenso. Más allá de los inconvenientes, no se debe renunciar a la forma, porque esta es la única manera en la que este equipo sabe jugar y además es la que le dió la mayor de sus alegrías. Hoy la pelota no termina de entrar y los pocos errores terminan siendo graves. Algo que hay que corregir, porque cuando la mano viene un poco torcida hay que ajustar las piezas a fondo. Solo de Melmac FC depende. Ojalá el éxito se pegue una vuelta por estos pagos. El tricolor se lo merece.

Para todos los que gustan del dulce de batata con chocolate, el uno x uno...

Nacho (5.5): Sin poder hacer nada en los dos primeros goles, venía haciendo un partido discreto. Pero en el tercer gol rival, compartió culpa con dos defensores y no pude evitar la caída de su arco. El partido que viene, vuelve la versión 2009 del gran arquero.

Seba (5): Lejos de sus mejores actuaciones, se lo vió muy nervioso durante el primer tiempo, alternando buenas y malas. Luego levantó un poquito haciéndose más firme en la marca y proyectándose, pero compartió error con su amigo y delegado, y terminó el partido solo peleando con los rivales.

Pepo (7): Se lo vió bastante firme en la marca, pero sin llegar a destacarse en una defensa muy desordenada durante todo el partido. No tuvo grandes quites, ya que lo atacaron poco y nada. Melmac sigue recibiendo pocas llegadas, pero muchos goles. El duro central, solo aprobó el examen.

Feli (5): Otro de los que falló en el gol decisivo de "Y también morcilla", así como también en el primer gol. Compensó su floja actuación en defensa con empuje y amor propio para ir a buscar el empate cuando todo el equipo se lanzó al ataque. No alcanzó.

Diego (4): Perdió mucho en el mano a mano, dudó en algunas salidas y raramente se lo vió impreciso con la pelota en los pies. Un jugador que nos tiene acostumbrados al sacrificio y a jugar el balón limpio y por abajo. Un rendimiento para olvidar el de uno de los polifuncionales de Melmac.

Colo (4.5): Partido malo el del volante central del tricolor. Esta vez le tocó hacerse cargo solo del mediocampo y nunca pudo encontrar el rumbo. Salió lejos a cortar, perdió en los mano a mano y no estuvo preciso en la entrega. También para olvidar su partido del sábado.

Nacho C (5.5): El tractorcito de las bandas lamentablemente no pudo sacar la diferencia a las que nos tiene acostumbrados. Fue al choque constantemente, no pudo desbordar ni ser punzante y se fastidió mucho después de que no le cobraran un penal claro. Mucho sacrificio para él, pero lamentablemente sin grandes frutos.

Mati C (9): Los que pensaban que Mati era solamente "un flaquito habilidoso que saca ventaja con su velocidad", les digo que estaban muy equivocados. Marca firme, pelota por el piso, corridas interminables y mucho pero mucho amor propio del menor de los Cicciaro para redondear una actuación formidable. Una rueda de auxilio de lujo para el tricolor.

Lucho (6): Empezó el partido con muchos errores en la entrega, pero poco a poco fue tomando confianza y fue el único que intentó acompañar a los de arriba para lastimar a la defensa rival. Sin terminar de destacarse, cumplió una labor aceptable entre mucho desconcierto. El capitán sigue por la buena senda.

Valen (9): Parece que el viaje en vez de sacarle fuerzas, se las dió. Se bancó el primer tiempo en el banco calladito y sin chistar. Y cuando le tocó saltar a la cancha, desplegó todo su fútbol por la banda, clavó dos goles (uno muy lindo) y fue el más peligroso del equipo. Gran retorno de un hombre que le hace mucha falta a este esquema tricolor.

Lean (5.5): El poco tiempo que estuvo en cancha, intentó acercarse a la pelota pero no logró romper a la defensa con sus desbordes. Tuvo una buena jugada por la derecha que no terminó de buena manera, pero nunca se dió por vencido. El principio de un retorno a las canchas después de una larga inactividad.

Eze (7): Quiso tener la pelota siempre e intentar que pasara por él para acercarle situaciones a los puntas. Algunas salieron bien, otra mal, pero siempre con mucho criterio para jugarla. Sacó unos lindos tiros de afuera (incluído un tiro libre que rebotó en el palo) y salió exhausto físicamente. Poco a poco va volviendo el enganche que el equipo necesita tener.

Salva (5.5): Pinceladas de talento y buen fútbol, que se mezclaron con algunas lagunas en las cuales se lo veía desconcentrado y sin poder hacer pie. No fue de sus mejores actuaciones, pero fue otro de los que intentó asociarse para llegar con peligro.

Latorre (6): No tuvo a su habitual compañero de ataque y lo sintió mucho. Nadie pudo cumplir ese rol y asistir al goleador. Así y todo, se esforzó desde el minuto 1 para generar las situaciones, pivotear para sus compañeros y buscar el gol constantemente. Le sacaron un cabezazo en la línea y desvió otro al lado del palo. Aprobado y nada más.