Melmac, el sabor del encuentro.

Una afamada marca de cerveza ha sabido crear uno de los slogans publicitarios más reconocidos: "el sabor del encuentro". Para la empresa del sur del conourbano, son ellos mismos el sabor que distingue y no puede faltar en cada reunión de amigos. Melmac si de algo sabe, es de juntarse y disfrutar tanto dentro como fuera de la cancha y la del pasado domingo fue sin dudas una de las jornadas extra futbolísticas más gratas de este equipo. Los tricolores le pusieron como siempre su propio toque de distinción a todo esto. A continuación el relato de un gran día...

Todo arrancó en Ciudad Universitaria donde MFC disputó el último partido del año. Fue un amistoso contra Ya van a ver, un equipo conocido por todos que milita en la División de Honor, la más importante de la UBA. Los amigos de Alf jugaron un gran partido y con una soberbia actuación colectiva en la cual se destacaron muchísimo los nombres de Valentino Spadari e Ignacio De Angelis (uno autor de los dos goles y el otro salvador de los tres palos de MFC en el momento clave) se impusieron por 2 a 0 ante el gran equipo aurinegro. El día arrancaba con el pie derecho.

Luego llegó la hora de una ducha fresca (no para todos) y la caravana hacia Pilar. Si algo le faltaba a Rochi, la hincha femenina número 1 de este plantel era recibir a todo el equipo en su morada. Ya lo había propuesto un par de veces pero los referentes del plantel habían decidido no molestar y festejar en otros lugares en aquellas ocasiones. Esta vez no hubo como negarse y sinceramente, si bien no es la idea adelantarnos cronológicamente en el relato, la hospitalidad de la familia será agradecida eternamente por este plantel. Una casa que nos recibió con los brazos abiertos.

Domenech ya estaba allí preparando desde hacía varias horas un cordero fabuloso. Como tentempié los muchachos arrancaron deleitándose con unos choripanes exquisitos. Luego, el plato principal fue servido y las fieras no tardaron nada en devorarse a la pobre ovejita acompañada de unas ensaladas bien abundantes. Un almuerzo bien a lo Melmac, con chistes, duelos picantes con mucho ida y vuelta de la mano de aquellos que se visten de Fantino, recuerdos de todos los colores y demás.

Mientras la digestión hacía estragos en los estómagos melmacianos llegó la hora de los "anti premios". Algo muy similar a lo que se había hecho en 2009, pero en esta oportunidad con más elaboración, mejores imágenes creadas por el crack de Nachito y como si fuera poco incluyendo a aquellos que no están dentro de la cancha pero que suman siempre para el grupo (Guido y Tota). Algunos galardones destacados como el de Pablo Pini que se llevo el "Obama 2011" o lo que le tocó a Javo "Papa Noel 2011". Fue sin dudas uno de los mejores momentos de la tarde en el cual los presentadores Genaro y Ezequiel tuvieron una actuación destacada y le pusieron muchísima onda a la entrega.

Más destacada aún fue la tarea de la pareja más conocida como "Oreo" en el fútbol tenis. Pini (la galletita) y Valen (el relleno) se llevaron el trofeo por ser los campeones del torneo que se realizó al lado de la pileta, en una pintoresca canchita instalada previamente a que llegue el plantel en su totalidad. La dupla no dejó ninguna duda y desde la calidad innegable de Spadari y el cabezazo letal (claro, acá no hace falta saltar) de Pablo Nicolás vencieron a todos, llegaron a la final y despacharon a la pareja Domenech - López, de digna actuación. Ah, el último punto, de yapa, fue de CHILENA.

Bien entrada la tarde, y con el sol que entregaba un clima perfecto, los espíritus melmacianos estaban más eufóricos que nunca. Se armó rápidamente para seguir compitiendo el violento fútbol piletero. Esta vez no hubo torneo, fue bastante más informal pero no por eso menos entretenido. En la gran pileta hubiesen podido conformar solo 2 equipos de 8 o 9 participantes y jugar todos contra todos. Por suerte los jugadores fueron más sensatos y nunca hubo equipos de más de 3 o 4 participantes, algo ideal. Otro pseudo deporte que entretiene mucho al elenco tricolor.

El sol se fue yendo y los muchachos comenzaban a irse en diferentes tandas. El truco ya era la principal actividad para varios mientras otros pocos se divertían lanzando una pelota de fútbol americano a lo largo del inmenso parque. La jornada era perfecta y por eso algunos hasta se quedaron a cenar y compartieron una mesa con toda la familia Rovagnati. En esa charla (cuentan los presentes) la síntesis fue, entre tantas preguntas, ¿Qué es Melmac?. La respuesta, independientemente de la que hayan dado en ese momento un par de referentes del plantel, se encuentra en esta nota.

Melmac es todo esto. Melmac necesita de todo esto para poder vivir. Melmac utiliza todas estas herramientas para triunfar. Melmac es un equipo de fútbol, arrancó siéndolo, sin dudas. Hoy abarca mucho más: son amigos, son tardes, son cenas, son mensajes de texto semanales esperando el partido, son cábalas, son discusiones encarnizadas entre la CD para tomar decisiones, es el blog, son los padres, las novias, los chistes, el fútbol tenis, son esas partidas de truco, son esas salidas al boliche, son esas ganas de hacer algo por el otro, son esa necesidad de jugar al fútbol y ganar, son un estilo de juego definido, son una entrega dentro de la cancha que no se negocia, son las banderas, los bombos y los papelitos en las finales, son los que te dicen "che, que bien Melmac eh", son los que quieren estar pero no pueden. Melmac son todas esas pequeñas o grandes cosas y mucho más. Hoy esto es lo que es gracias a dos cosas fundamentales: el esfuerzo y la pasión. Sin esfuerzo en la vida, nada se consigue. Pero si a ese esfuerzo lo empuja la pasión (con todo lo que esta palabra representa), el resultado será siempre mucho más grato y a la larga o a la corta, se verán resultados positivos.

Melmac son ustedes, Melmac somos nosotros. Esto es Melmac. Más que nunca, Arriba la M.