Como roer un hueso de la pera

Tras una noche agitada para varios, MFC debía afrontar en el mediodía del domingo al equipo colista del torneo: Lowachosdesiempre. Si bien la situación de los equipos era antagónica, a lo largo del certamen esta clase de partidos le habían traido complicaciones a Melmac. En una recta final donde todos los que pelean arriba saben que no pueden dejar escapar más puntos, éste se presentaba como un partido clave. Con algunas ausencias entre viajes y enfermedades, la M igualmente presentaba un equipo de alto nivel. Como sucede en cada encuentro.

Los primeros 20 minutos mostraron a un Melmac dominador. Otra vez bien de atrás hacia adelante, con dos centrales firmes que sacaban al equipo hasta la mitad. Los laterales colaboraban en la marca al mismo tiempo que se sumaban al ataque para generar superioridad numérica por las bandas. En ese arranque lo mejor se veía por derecha, donde Ivan Noya se volcaba para asociarse con el volante y el lateral. Desde allí se iniciaron la mayoría de las jugadas y por la izquierda llegaban para definir. Claro, ese último toque estaba faltando. Los centros no eran precisos a veces y en otras los que llegaban a situación de gol no estaban finos. Promediando la mitad de ese primer tiempo los interplanetarios se apagaron un poco. Faltaba hacer girar la pelota un poco más de un sector al otro de la cancha. Pero era lógico tras tanto desgaste inicial. Aquí nuevamente la buena tarea defensiva impidió que el rival creciera y tuviese situaciones de peligro. Se fue la primera etapa con la sensación de que era cuestión de hacer un gol para desarmar la estructura de LWDS y a partir de allí poder definir el pleito.

Fue muy similar también el arranque del complemento. De hecho tal vez un poco más intenso desde la actitud. Es que a medida que los minutos pasaran, a la M se le iban a ir acabando los cartuchos. El reloj corría y el marcado seguía mostrando paridad. Nuevamente se veía mucho juego asociado, pero el resultado era siempre el mismo: faltaba esa última puntada. Los cambios intentaban dar una variante distinta en ofensiva y hasta un poco de aire. La cosa no cambiaba mucho. Ya a los 20 minutos Genaro, quién había sido remplazado por Salvador, reingresó al campo en lugar de Pini y MFC pasó a marcar con 3 en el fondo. No obstante tantos cambios, tanto juego asociado, tanto arriesgar y hasta marcar mano a mano, el gol llegó por la única vía que hasta ese momento no se había probado: con un tremendo zapatazo de Matías desde 30 metros que se clavó al ángulo. Tal como se presentía, el gol descomprimió y abrió espacios. Y fue Leandro quien mejor los supo aprovechar para reencontrarse un poco con su juego y marcar un doblete que redondeó un resultado más acorde a lo sucedido durante los 80 y pico de minutos de juego. Fue un 3 a 0 tan justo como trabajoso.

Fueron 3 puntos importantes. Sobre todas las cosas porque Melmac volvió a jugar muy bien. Y en este caso lo hizo ante un rival de esos contra los cuales a lo largo del año no había podido desarrollar un gran juego. El rival fue un equipo que no se desordenó hasta que no vulneraron su valla y que mientras pudo, intentó presionar en la salida. Los amigos de Alf siempre buscaron ser protagonistas. Hubo que insistir y mucho. Nada nuevo en un torneo donde ningún equipo regala nada y hasta el último de la tabla sale a jugar ordenado y con intenciones de hacer un buen partido. Queda menos. Falta mucho. Que el éxito siga vistiendo la casaca tricolor. O las que preste la gente de la Secretaría de fútbol.

Para todos los que creen que en "La fiesta de Javo" había un 70% de hombres y un 30% de mujeres, este fantástico y espléndido uno x uno...

Nacho (6): Sencillamente fue un espectador a lo largo de todo el partido. El rival presionó, pero nunca llegó con claridad. Desactivó bien un tiro libre promediando la segunda mitad y alternó buenos saques en busca de los delanteros y volantes. Cumplió.

Pini (6): No lo exigieron en la faz defensiva pero no supo ser lo incisivo que es siempre a la hora de pasar al ataque. Sin cometer ningún error grave, le faltó encontrar espacios para ser ese lateral brasilero de Vicente López. Ya llegarán esos centros de zurda tan precisos (?).

Feli (8.5): El paletón está pasando un gran momento y el otro día lo volvió a ratificar. Si bien no eran unos grandes virtuosos, los delanteros rivales siempre acechaban y esperaban un error o una contra. La firmeza de este muchacho se los impidió todo el tiempo. Gran año para él.

Eloy (8): La dupla central anda muy bien y él es el otro responsable. Muchísima concentración para no distraerse en un partido que pedía achicar espacios y salir a cortar a los costados para recuperar rápido. Muy bien por el Dr. de los dientes. Por algo se lleva tan bien con el paletón.

Pepo (9): ¿Cómo hace un 4 para ser figura? Este tipo parece tener la respuesta. En la marca, ninguna novedad: impecable. Para soltarse y pasar pareciera tener un reloj que le indica cuándo, cómo y hasta a donde hacerlo. La espalda jamás se la ganaron por su gran velocidad para rehacerse. Sin dudas uno de los jugadores más importantes del equipo.

Nachito (6.5): Incansable como siempre, a pesar de no encontrar ese último toque. A la hora de centrar, faltó una pisca de claridad para encontrar a sus compañeros. Y cuando tuvo sus chances de gol no pudo con el arquero en algunas y no le quedó la pelota en otras. Igual, un buen partido.

Javo (5.50): Al del cumple se lo notó más impreciso que de costumbre. Sufrió la presión del rival y su calesita no estuvo tan aceitada como otras veces. Sin embargo siempre pidió la bocha para iniciar el juego limpio. La próxima un poquito de WD-40 y santo remedio.

Lucho (7.5): Se dedicó más a tocar en corto o en profundidad que a desbordar y lo hizo muy bien. Se asoció sobre todo con Pedro tanto para generar el 2 x 1 en ese sector como para relevarlo en defensa. Fue un buen partido del lungo volante. Siguen las buenas para él.

Valen (7): Al rubio se lo nota muy metido y asumiendo el rol de conductor. Si bien estuvo impreciso a la hora de definir como todo el resto, e incluso a veces también el armado, siempre fue la primera opción del ataque tricolor. Con este sacrificio MFC se ilusiona.

Mati (8.5): De entrada cometió un par de faltas tontas. Pero su tremendo golazo hizo olvidar cualquier cosa. Tuvo la llave del partido. Y a partir de ahí se mostró firme, se hizo dueño del medio y fue pieza clave de la levantada tricolor. Va recuperando su nivel.

Lean (8): Otro que de arranque no podía terminar de dar una solución para quebrantar la defensa de LWDS. Luego se soltó, supo pisar el área, convertir y hasta asistir a sus compañeros. Así es el Rudy que le sirve a MFC. Otro que volvió a mostrar una buena cara.

Lobo (8): Desbordó constantemente y se mostró muy activo y asociado tanto a su compañero de ataque como también a los hombres del medio. Seguramente con dos o tres centros más precisos se hubiera convertido en una de las figuras. Que siga picante.

Gena (7.5): Es tan indudable su gran nivel como su falta de gol. Define ya de todas las formas y la pelota no quiere entrar. A pesar de eso, se desdobla como piovote y entra mucho más en juego que cuando estaba dulce. Aplaudan, aplaudan no dejende aplaudir, los ... ¿goles?

Salva (7): Volvía de una lesión y lo hizo de muy buena manera. Cuando entró de 9 se transformó en una referencia. Ya con el marcador abierto se tiró un poco más atrás para dar una mano en el medio. MFC lo necesita con ritmo en esta recta final. Se erró un gol "hecho".

La hinchada (10): Se aplicó derecho de admisión y toda la barra quedó afuera. Una pena.